domingo, 31 de julio de 2011

Pañuelos amarillos


Se dice que en el viaje de la vida lo importante es viajar. Que el camino nos va dando sorpresas y ciertamente uno va acumulando sabidurías, penas y amores. Hay mucho cine que nos muestra el viaje como metáfora de la vida, y múltiples maneras de narrar eso que sucede en el camino, cuando nos vamos encontrando con personas que nos revelan sus contradicciones, y nos invitan a revelar las nuestras. Todos recordamos, por ejemplo, Historias mínimas de Carlos Sorín -una maravilla- o Una historia sencilla del gran David Lynch, una belleza. Bien, El pañuelo amarillo (2008), de Arthur Cohn , con Wiiliam Hurt como protagonista, es una muy bella película de este tipo. 
Hurt, con su genialidad, personifica a alguien que de a poco, con sus inusuales compañeros de ruta, por ellos y através de ellos, se va dando cuenta de qué es lo que lo empuja a caminar y hacia donde van sus pasos. Un hombre difícil en su capacidad de diálogo, siente que esos dos jóvenes -con sus dramas generacionales- le van poniendo color al camino que termina en ese punto donde, como muchas veces sucede, se dejan en amorosa armonía como diciendo: "hasta aquí estuvo bien, era 'ésta' la cuestión de mis desvelos. Buen viaje". Es una película para ver, disfrutar y seguir el propio camino....
Se puede bajar de internet.
Salú !!! 

viernes, 29 de julio de 2011

Pintar o hacer el amor

Si uno tuviera una mirada bíblica diría que la historia humana empieza con Adán y Eva. Y uno podría decir entonces, entre muchas otras cosas, que esa historia es humana porque está atravesada por el deseo. ¿Cómo se despierta? ¿Cuáles son sus reglas? ¿Sus límites? Los olores, los colores, las texturas, las miradas, todos los sentidos parecen erizarse cuando se pone en marcha esa parte de nosotros. 
Los personajes de esta película dicen poco pero lo dicen todo. Dicen poco pero se arriesgan a que la vida vaya tomando forma, no parecen muy dispuestos a contener eso que hizo humanos a los personajes bíblicos, aunque todo sucede con mucha naturalidad. Pintar o hacer el amor (de los hermanos Arnaud y Jean-Marie Larrieu) es una película francesa para no perdérsela. Es para verla, en lo posible, en compañía, y dejar que fluyan después las reflexiones y las múltiples miradas posibles. Es una película para disfrutar, escapa un poco a esa pesadez francesa tan típica y sus silencios cargados de erotismo son muy bellos.
La actuación de Sabine Azéma y Daniel Auteuil son maravillosas
Les dejo además un blog muy bueno sobre este tipo de cine que además hace un muy buen comentario de esta película.
Salú!!!

domingo, 24 de julio de 2011

La reparación de electrodomésticos y lo que nos piden las damas

Por suerte, o no, las cosas han cambiado entre los géneros. Aunque todavía los hombres zapateamos y ellas sarandean en las chacareras, las cosas indudablemente fueron mutando. Y, debemos reconocerlo, la tecnología también aportó lo suyo en este proceso. Pensemos que hasta hace muy poco tiempo la reparación de electrodomésticos era una de las actividades propiamente masculinas. Pues bien, el desarrollo se ha ensañado con la masculinidad porque ahora es mas barato comprar una licuadora nueva que repararla. Pero no importa, muchos insistimos porque, además, reparar una licuadora (por ejemplo) es mucho mas que estar dispuesto a disfrutar de un buen licuado. Si uno le busca la vuelta (lo que en el caso de una licuadora estaría bien a la vista) la reparación de electrodomésticos nos puede conducir al insondable mundo de lo que una mujer requiere del hombre. Si señor. Si Ud. no me cree pruebe con el electrodoméstico que siempre le trae problemas a su vecina (poniéndole ónda, por supuesto), y después me cuenta. Para no perderse en su afiebrada imaginación, le dejo las recomendaciones de nuestro querido Alejandro Dolina para que os guíe. Haga clíck en el reproductor....
"Difrutenlón" y  salú !!!


El socialismo: ¿cosa de viejos?

Mucho se ha dicho, y se dice, sobre el sistema político - económico cubano. Personalmente objetaría muchas cosas, alabaría otras y muy seguramente no estaríamos de acuerdo en lo que merece el repudio o la admiración. Martín Losteau, en su exitoso Economía 3d, señala esas contradicciones y su propio juicio es fruto de ellas. Dice: El sistema cubano es sumamente ineficiente, con severos problemas de incentivos que afectan al aparato productivo. La política agrícola ha sido calamitosa y a nivel industrial lo que se genera es limitado y de mala calidad… y aunque el bloqueo estadounidense tiene su impacto, no caben dudas de que es la organización que han elegido para su economía la que es inviable. No digo nada respecto a ello, puede que tenga razón pero -como él mismo dice- sucede que en Cuba nadie se va a la cama con hambre. En el continente americano hay solo dos países en el que la indigencia no existe: Canadá y Cuba.
Bien, dejemos a Martín Lousteau y sus contradicciones (que podemos compartir o no) y vayamos a otro dato que salió en un blog que se llama “Viejos las pelotas”. ¿Saben Uds que país de América tiene la mayor cantidad de población longeva? Cuba. Si señor. Con 11,2 millones de habitantes, Cuba tiene 1.551 centenarios, la tasa más alta del mundo, y una esperanza de vida de 80 años para las mujeres y de 78 para los hombres.
A nadie escapa que eso se debe a la cobertura total en asistencia social y en los servicios de salud como a la existencia de otros derechos garantizados (educación, cultura, deporte y recreación). Todo esto, no libera al Estado cubano de lo que sucede en otras áreas de gobierno y de su organización económica, ni pretende compensar males de ningún tipo. No, pero es bueno aprender de lo que otros hacen bien.
Es cierto que la longevidad tiene que ver con múltiples factores, no obstante -como dijera la Mona Giménez- algo tendrá el petiso. Es decir, algo han hecho bien los cubanos para que suceda esto. Su sistema de salud, su alimentación, y también –porqué no- su actitud ante la vida.
                                                                               El blog “Viejos las pelotas” habla un poco de eso:
Carlos Hierrezuela, ex profesor de 73 años, necesita días de 48 horas. Cuida autos en una ferretería; va a clases de Tai Chi y a la Universidad del Adulto; escribe poesía; está en un club de danzón; baila son, cha-cha-chá, salsa y hasta reggaetón.
Glise Fariñas es su pareja de baile. "Fui bailarina y modelo de cabaret. Los cubanos somos muy alegres y eso influye en las ansias de vivir", dice esta coqueta septuagenaria que no sale a la calle si no lleva perfume y carmín en los labios.
"Quiero ser cada día más bella. Hay que soñar y amar. El corazón no envejece", dice la pizpireta de Glise, tras ir con Carlos al ensayo de coro. ¿Tienen pareja?, pregunta la AFP. "Somos amigos, muy muy muy amigos", dicen a carcajadas.
Que lindo, no? Me los puedo imaginar y me digo, “¿porqué no podemos hacer algo así cuando lo hizo una isla caribeña de 11 millones de habitantes, con un territorio equivalente a una veinteava parte de la Argentina?"

A parte del citado blog, Viejos las pelotas, les dejo dos links para el que esté interesado en el tema: